(*) Por Roberto Colmenarejo
Cuando la billetera languidece cerca de fin de mes -o cuando estamos pasando épocas de “vacas flacas”- uno empieza a eliminar gastos superfluos o pequeños “lujitos”. Sin embargo, aún en épocas difíciles no es necesario resignar el tomarse una buena copa de vino con la comida.
Argentina es hoy el quinto productor mundial de vinos. La inmensa producción nacional abarca todos los segmentos de precios y gustos del consumidor por lo que es posible encontrar vinos ricos y de notable calidad, aún en precios aptos para todos los bolsillos.
Hay muchos productos en nuestro país con una excelente relación calidad-precio, sólo hay que investigar hasta descubrirlos. A veces el consejo de un buen amigo ayuda, así que aquí va una lista de vinos con precios muy amigables:
1. Termidor Cabernet Sauvignon S/A ($10): Entre un mar de vinos en tetra-briks apenas aceptables, aparece este ejemplar correcto para su segmento de precio. Un tinto bien ligero, apenas frutado y algo dulzón. En boca no tiene grandes atributos, pero tampoco defectos notables. Puede andar en asados multitudinarios o para tomar con bastante soda en un día de calor.
2. Finca Natalina Ugni Blanc-Chenin S/A ($14): Un vino blanco elaborado en San Juan, de estructura simple y acidez vivaz. Los aromas son limpios y frutales, la boca es agradable y fresca. Todo lo que se le puede pedir a un vino es este segmento.
3. López Blanco 2010 ($17): Un clásico de los blancos argentinos. Un vino elaborado con uvas semillón, con alcohol moderado y silueta austera. Es ideal para comer, pues su perfil delicado respeta los aromas y sabores de los alimentos. Un acierto en la mesa.
4. Estancia Mendoza Syrah 2010 ($18): Un vino mendocino simple y rico. Es un tinto delgado, con aromas y sabores entre frutales y especiados. La boca es franca y liviana, así que se toma con mucho placer. ¡Una “pegada” en ese precio!
5. Suter Etiqueta Marrón S/A ($18): Otro blanco tradicional, elaborado con uvas chenín en la histórica bodega Suter (de San Rafael). Un vino delgado y fresco; de nariz simple (entre herbácea y frutada) y una boca agradable apenas abocada. Servido bien frío al lado de la pileta en una tardecita de calor, no tiene competencia…
6. Santa Julia Syrah Rosé 2010 ($20): Un rosado muy bien hecho, que cumple todas las expectativas de su rango de precios. Aromas frutales frescos (frutillas, frambuesas, cerezas) y algo especiado en nariz; boca seductora, frutada y refrescante. Para comidas livianas, como ensaladas o tartas, va de maravillas.
7. Norton Cosecha Tardía 2011 ($24): El pionero de los cosechas tardías de Argentina, sigue siendo -a mi entender- el mejor en su rango de precios. Un vino blanco dulce de nariz frutada, melosa y muy agradable, que incita a beberse un par de copas. En la boca se siente la dulzura, pero está muy bien balanceada con la acidez, así que no empalaga para nada. Una copa en el aperitivo, o quizás acompañando una porción de lemon pie, me parecen ocasiones excelentes para disfrutarlo.
8. Cafayate Malbec 2011 ($24): Un malbec salteño por donde se lo mire, correctamente elaborado y de calidad pareja a través de los años. En nariz es frutado, especiado y con una puntita terrosa (típica del terruño cafayateño). En boca es gustoso, de taninos suaves y persistencia media. Compañero ideal para unas empandas de delivery o una pizza compartida con los amigos de la universidad.
9. Durigutti Bonarda Clásico 2009 ($40): Se habla mucho de esta variedad en Argentina pues hay muchas hectáreas plantadas y buenos exponentes para probar. Si querés saber qué esperar de esta uva, este es el vino para empezar. Es un tinto de color intenso, aromas golosos de frutas maduras y mermeladas combinados con sugestivas notas tostadas y ahumadas. En boca es un vino voluminoso pero ágil, fácil de beber, con taninos amables y persistencia larga. ¡Hay que probarlo!
(*)Sommelier y docente – [email protected]
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