Irreverente, un lugar para armar la pizza como te dé la gana

Malaquías y María Eugenia Toseti son madre e hijo, pero en este proyecto, además, son socios.

Irreverente es una pizzería que nació como negocio hace casi 10 años en Colonia Caroya, pero en junio de este año se mudó a Córdoba capital con una nueva identidad. “Buscábamos reinventarnos”, cuenta Malaquías a Circuito Gastronómico.

Irreverente comenzó siendo simplemente el nombre de un proyecto, pero con el paso del tiempo y a medida que tomaba forma, Malaquías y María Eugenia fueron descubriendo que esa característica los definía cada vez más, tanto a ellos, como al lugar. “Entre más tiempo pasaba, más nos convencíamos de que éramos nosotros”, cuenta María Eugenia.

El nombre representa el espíritu, tanto del lugar como de esta madre e hijo devenidos en socios y Marcos, la pareja de ella. Ser irreverentes, para bien y para mal, implica nadar contra la corriente, y hacer las cosas de manera distinta representa dificultades.

María Eugenia, Marcos (su pareja) y su hijo Malaquías, llevan adelante el proyecto Irreverente.

Es así como llegaron a que un producto tan convencional como la pizza, encontrara en su local una nueva forma de ser disfrutada. En Irreverente, cada comensal “diseña” su pizza según sus gustos, sin impedimentos, sin juicios.

El reto

“La idea de poner un local donde la gente arme su propia pizza surgió de notar que siempre que íbamos al algún lado veíamos que todo estaba como muy armado, no había muchas opciones para elegir”, relata María Eugenia. “Eso no quita que sea rico, pero quién más que uno mismo sabe qué es lo que más le gusta”, añade Malaquías.

En Irreverente, las personas pueden elegir la base de su pizza entre dos tipos de masa (casera o extra fina), salsa común o picante y queso cremoso o muzzarella.  Luego pueden agregar los toppings que deseen (se cobra por topping).

El stock, el armado y la preparación de la pizza se complejizan, pero la satisfacción de ver al cliente cuando llega a la mesa la pizza de sus sueños, lo vale.

“Es una linda forma de complicarse la vida”, asevera Malaquías. Y cuenta: “Incluso, los sistemas gastronómicos no están orientados a este tipo de experiencias. No hay ningún software enfocado a una experiencia tan armable. Fue muy difícil para expresarlo también en las plataformas de pedidos y delivery”.

En Irreverente vos elegís los toppings de tu pizza.

Gustos son gustos

Hay pedidos de los clientes que son realmente irreverentes. Muchos sorprenden por la cantidad de ingredientes, y otros por las combinaciones de sabores.

Hace un par de semanas pidieron una pizza con ocho toppings. Ya ni recuerdo qué tenía. Era mucho, realmente”, relata Malaquías. “Es más, pensábamos que se trataba de un error. Fue complicadísimo hacerla, entre otras cosas, porque si un cliente pide ocho toppings es porque quiere sentir el sabor de ocho toppings. Fue difícil”, añade María Eugenia.

“Tenemos otro cliente, fanático del queso, que siempre pide una pizza con siete quesos, eso es casi un kilo de queso. Es una complicación cocinarla, pero estoy seguro que ese cliente aprecia lo que hacemos por su gusto particular y sé que no lo va a conseguir en otro lado”, dice Malaquías.

“También tenemos el caso de una madre que se fue feliz porque le permitimos a sus hijos comer la pizza como les gusta: solo masa y salsa”, cuenta María Eugenia. Ananá con anchoas, ananá con queso azul, rúcula y palmitos son otras de las combinaciones irreverentes que han pedido los clientes.

Menú secreto

Además de las pizzas para armar, en Irreverente hay opciones particulares para verdaderos conocedores. “Los tenemos en Instagram como mejores amigos”, cuenta Malaquías. “Son pizzas que no se basan en los toppings y, por ende, no se arman de la manera tradicional”, añade.

Un ejemplo es la pizza bolognesa: lleva masa, 570 gramos de salsa bolognesa, 300 gramos de queso muzarella y 100 gramos de parmesano gratinado.

La pizza bolognesa de Irreverente.

“¿Viste cuando tu mamá hace salsa bolognesa y vos venís con el pancito para untar? Bueno, así nació la idea. Cada vez que yo cocinaba, los chicos estaban ahí con el pan, untando la salsa”, relata María Eugenia.

Verduras al wok, mariscos salteados en manteca, roñosa, espinaca y salsa blanca son otras irreverencias que disfrutan los privilegiados.

Preferimos hacer algo que sea muy especial para algunos, antes que algo que sea algo normal para todos. Sabemos que nuestro producto no es lo que todo el mundo busca, pero sabemos que hay personas que buscan exactamente esto”, finaliza Malaquías.

Contacto

Irreverente está ubicado en San Jerónimo 282. Teléfono (0351) 153-521302.

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