Cómo fue el rediseño de La Oriental, la confitería más antigua de Córdoba

octubre 7, 2024

El Centro de Córdoba viene experimentando transformaciones en estos últimos años: se crearon las Supermanzanas, se dispuso de más espacio para los gastronómicos en la avenida 27 de abril y un verdadero y notorio cambio fue que el tradicional bar Sorocabana ya no se encuentra en su clásica esquina, sino que esa esquina ahora alberga a otro ícono de la gastronomía local: la Confitería Oriental Plaza.

Con más de 100 años de historia este local fue pionero en el Centro cordobés. Durante estos años experimentó muchas transformaciones, como por ejemplo, la unificación de un área que estaba solo destinada a caballeros, para que puedan compartilo las familias.

Y el más reciente de los cambios fue haberse ubicado donde estaba el Sorocabana. Allí no solo cambió su ubicación, sino que realizó una renovación en cuanto a su ambientación, espacios y mobiliarios.

«El diseño del equipamiento en sí mismo está pensado por el arquitecto Alberto Roganti, que a su vez tiene la responsabilidad de tener una mirada más amplia y más macro con lo que es el corredor Centro», comienza contando Esteban Dutto de la empresa Andre Kevin, encargada de la realización del equipamiento. «Este es el primer bar del proyecto público-privado de lo que es este corredor, que comienza en las calles Buenos Aires y San Jerónimo. Entonces, de alguna manera este va a ser el primero, el que va a marcar el camino para los que vienen», remarca.

El nuevo mobiliario que modernizó a La Oriental.

Cómo se pensó el nuevo equipamiento

Yendo a los detalles del rediseño, Esteban cuenta: «El equipamiento está pensado a partir de ciertos requerimientos: que sea antivandalismo, de fácil mantenimiento y resistente. Originalmente pensaron en equipamiento fijo y después, con el asesoramiento del equipo de Andre Kevin en lo que es la materialidad, se decidió una base que es un clásico de arquitectura, que es un modelo Saarinen en fibra de vidrio que tiene en su interior cemento para darle peso y que no se mueva, para que funcione como si fuese un mobiliario fijo. Y tiene la tapa en piedra, es un granito que se llama granito Negro Boreal Leather. Las sillas son metálicas, de la marca SIMET que es número uno en Argentina en lo que es mobiliario en acero para gastronomía y son sillas que tienen su diseño, que son prácticas, que son apilables, que son resistentes, que tienen pintura de epoxi para exterior, por lo cual juntando esta materialidad entre la piedra, la fibra de vidrio, el acero y un almohadoncito para darle mayor comodidad, creo que hemos logrado y conformamos espacios acordes a lo que semejante proyecto demandaba».

Y resalta: «Más teniendo en cuenta de una esquina emblemática del cual se viene de una historia, lo que es el Sorocabana, en el cual era todo madera, prácticamente afuera no tenía mobiliario exterior, en el cual se generó un gran cambio de imagen y una gran renovación, entonces todo un desafío».

Este equipamiento se complementa además con un grupito de mesas plegables en acero de 60×60 que van con las sillas de polipropileno color negro, apilables. La idea de disponer de este mobiliario es para usar cuando hay eventos o cuando la capacidad se vea sobrepasada.

En líneas general, Esteban define este mobiliario como «contemporáneo, resistente, de diseño, muy agradable a la vista y a su vez es un mobiliario que es usable, es cómodo, por lo que cumple con los requerimientos fijados tanto por el arquitecto como el cliente final, que es el titular del bar».