Primer acto:
Un cliente entra en la fiambrería del barrio y pide jamón cocido. Le ofrecen por defecto el de precio intermedio.
¿Algo más?, pregunta el vendedor.
Sí, 200 gramos de queso cortado en máquina.
La situación del comprador guiando la compra con sus pedidos se repite una vez más hasta cerrar un ticket de $ 3000. Paga y se va.
Segundo acto:
El mismo cliente entra en Gente Amiga, la fiambrería de Av. 24 de Setiembre 1989. Pero frente al primer pedido, el vendedor pregunta si quiere jamón para la pizza, la picada o un sándwich y sugiere un producto de una calidad específica.
Luego recomienda una muzzarella que se derrite de forma especial. Y a renglón seguido le hace probar una rodaja del “mejor salame de Colonia Caroya”, que forma parte de la tabla que está preparando. “¿Sabía que armamos tablas y las llevamos a domicilio? Salen con el pan casero de la casa. ¿Quiere llevarse uno?”, pregunta.
Resultado: el cliente sale feliz, con una compra de $ 9000, con productos que no había pensado comprar y llama a sus amigos para armar una picada con la tabla que le ofrecieron.
Puro marketing
Con cuatro socios provenientes de distintas actividades (desde un bancario y un empleado del Ministerio de Educación hasta un ingeniero mecánico), Gente Amiga trajo aire fresco en una actividad que deja margen para innovar.
“Nuestros empleados son vendedores, no meros atendedores. Y estamos metiendo marketing por todos los espacios que podemos”, cuenta Santiago Jaraba, uno de los socios de la empresa que se formó en la pandemia.
Ese marketing va desde ofertas por hormas para compras familiares, hasta tablas de picadas, cajas para regalos, productos exclusivos, sándwiches listos, eventos a la calle, un food truck y una ruleta con sorteo para los que regresen al local con la bolsa reciclable de la marca.
Pese a ser un negocio físico, tradicionalmente vinculado a un área cercana, Gente Amiga apostó a atender toda la ciudad con sus picadas, que lleva con Rappi y Pedidos Ya.
También se diferencia con el marketing en redes: su Instagram cuenta a la fecha con más de 12.000 seguidores y es habitual que encaren campañas con influencers.
Mayorista con servicio
El impulso de estos emprendedores ha permitido que Gente Amiga abra un segundo local en Ovidio Lagos 310 en su tercer año de vida e incursione exitosamente en la distribución mayorista, un rubro donde la competencia es más fuerte.
“Tenemos una relación especial con algunos proveedores que nos permite conseguir excelentes precios. Pero además, los complementamos con servicios”, explica Jaraba.
Y pone un ejemplo: “Si tenés un bar y te quedás sin fernet un sábado de mucho trabajo, nos llamás por teléfono y allí estaremos: disponibles 24 horas, los siete días de la semana”.
A partir del pasado julio, la distribuidora también colabora con nuestra caja La Gurmet en la búsqueda de productos únicos y a los mejores precios.
Buscalos en Instagram como @genteamigadistribuidora
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